HIZO UN AÑO

Después de varias intentonas se conocieron. Era un dia frio de invierno. Quedaron en un lugar neutro.
Cuantas veces habian imaginado la expresión de la otra parte al encontrarse.
El olor de la piel al saludarse y la sensación que recorrió por sus cuerpos al fundirse en un abrazo.
Compartieron risas, confidencias, paseos, comida e ilusiones antes de separarse pensando ella que era un buen comienzo.
Hace un año todo eso parecía tan especial..
Luego todo se convirtió en silencios, en mentiras y en manipulación de sentimientos con un solo fin.
Que pena de año.
Ahora......solo el vacío del tiempo perdido perdura y la sensación de impotencia hiela el corazón como ese dia frio de invierno....

AQUEL LUGAR

   El sabía lo que quería vivir con ella.
   Ella deseaba experimentar, conocer y sobre todo complacerlo.
   No era algo corriente lo que habían planeado pero estaban dispuestos a correr el riesgo.
   Se habían conocido unos meses atras, todo era excitante en esa relación incluso los silencios; sus encuentros estaban cargados de tensión sexual desde el principio como si de un imán se tratase.
   Esa noche ella se esmeró con su vestimenta, su cuerpo perfeto delicadamente perfumado estaba envuelto en medias y ropa íntima de seda, encima un sencillo vestido rematando el atuendo con unos zapatos de tacón de vértigo. Se sonrió mientras se los calzaba..él no soprtaba la diferencia de altura pero...hoy se lo perdonaría...
   El la esperaba en el portal y con su coche recorrieron los pocos kilómetros que los separaban del lugar. Era una casa enorme y nada hacía presagiar lo que en su interior sucedía.
   Los recibió una mujer sensualmente vestida, haciéndolos pasar; en su interior una amplia sala que parecía una cafetería. Ella pensó: Esto es algo muy normal.....
   Bebieron algo y conversaron sobres cosas triviales sin saber un poco que hacer cuando de repende de una sala contigua comezaron a oirse gemidos de mujer y golpeteos de piel contra piel. Se acercaron al lugar y encontraron una sala oscura donde las parejas bailaban abrazadas. La música los envolvió e hicieron lo propio...(pensó en la difierencia de altura otra vez.....era inevitable). Notaron como unas manos los rozaban animándolos a desacerse el uno del otro impulsando a seguirlas, intercambiaron sus cuerpos y en una fracción de segundos los cuatro se enredaron en un maremagnun de sentidos, de piel, de excitación. No quedó un recobeco por explorar, una caricia por sentir ni una humedad sin respuesta; el tiempo pareció detenerse mientras los cuerpos alcanzaban cotas inimaginables de placer.
   Así como comenzó todo tambieén terminó, estaban satisfechos por lo vivido, por haberlo compartido y sabían que eso perduraria en su recuerdo....por siempre.

EN LA OSCURIDAD

   Se conocieron en un chat. Su soledad la llevó a crear un perfil en una red de contactos. Ella no esperaba nada, no queria nada, quizas con suerte romper la monotonía, charlar con alguien ajeno a su entorno y conocer personas que se sintieran tan solas como ella.
   Después de varias semanas de conversaciones insulsas, sin un interés especial con hombres que solo esperaban de ella poco más que sexo ...lo encontró. En realidad fué el quien la descubrió.
   Su foto no dejaba vislumbrar con nitidez sus facciones y su forma de expresarse era tan ambigua como excitante. Sin embargo algo de él la cautivó automáticamente.
   Se creó entre ellos una dependecia de charla, de confesiones sinceras y de intereses mutuos que los llevaron a anhelar un encuentro.
   Ella tenía miedo, no estaba preparada y tanta afinidad y complicidad creaba una barrera que no dejaba acercarse a él.
   Puso sus normas para el encuentro, confiando que él no las aceptara. Su sorpresa fué mayúscula cuando él le respondió que cuando, donde y a que hora. Estaba dispuesto.
   Llegó el día y temblorosa se vistió de manera discreta pero sensual, su vestido dejaba entrever su anatomía de curvas, generosos pechos e interminables piernas enfundadas en medias de seda.
   Se acicaló el pelo y dejó que su perfume envolviera su cuerpo. Estoy lista -pensó.
   Tal como habían acordado ella llegaría primero al hotel y mandó un mensaje a su móvil con el número de la habitación. Mientras él llegaba se aseguró de que todo estubiese como ella quería, música suave, olor de rosas en el ambiente, temperatura acojedora y sobre todo que no hubiese resquicio de luz.
Se quitó el vestido quedándose con su ropa íntima nueva y esperó.
   No tubo que hacerlo mucho, un sonido quedo en la puerta anunció que había llegado. Ella le abrió quedándose detrás de él, situándose a  sus espaldas.
   Como lo pactado ella lo fué desnudando aspirando su perfume exótico mezclado con el aroma de su piel, poco a poco, en silencio y en total oscuridad le acarició la espalda, le recorrió el cuerpo con la yema de los dedos y cuando lo giró para besarlo lo atrajo hacia sí apretando su cuerpo contra el suyo.
Ambos percibieron el deseo en el cuerpo del otro...
   Ella le guió a la cama y allí dieron rienda suelta a los cuerpos, jugaron, lamieron y se humedecieron mutuamente hasta que los dos como por arte de magia necesitaron pertenecerse por completo.
   La oscuridad y el silencio fuero cómplices de aquel acto salvaje, brutal y extenuante, solo roto con un quejido de placer emitido al unísono.
   El se quedó adormidlado y ella silenciosamente se escurrió de la cama apurándose a ponerse la ropa. Salió de la habitación con una sonrisa de niña traviesa.
   Al llegar a su casa borró el perfil. Su fantasía se había cumplido.

LA CULPA SIEMPRE.....DEL TABERNERO!!!

   Como muchas tardes-noches de viernes me encontraba sentada en aquel bar; era un sitio con muy buen gusto donde la gente disfrutaba tanto en compañía como estando solos. El ambiente agradable, la música perfecta  y el murmullo de las conversaciones se entremezclaba con el sonido de la lluvia que golpeaba la ventana.
   Solía quedarme bastante rato; unas veces leyendo la prensa, otras con mi ordenador y otras simplemente dejando pasar el tiempo de mi soledad.
   Este día era uno de esos...me abstraje con la ida y venida de las personas, tratando de adivinar sus vidas, sus gustos...
   Se había echo tarde sin darme cuenta y me encontré sola en mi rincón preferido intentando acabar ese chocolate tan especial que tanto me gustaba.
   En un momento se acercó el camarero y con una voz queda y algo cortada me dijo: -si no te importa, me gustaría cerrar.
   Me quedé un poco sorprendida ante mi propia estupidez. -Mira que no darme cuenta...
   Le contesto: Perdona, enseguida recojo; lo siento.
Él ante mi rubor; con una sonrisa complaciente asiente y comenta: no te preocupes, si quieres recojo y te acompaño y así tu me ayudas con la reja....es algo pesada.
   Mientras yo recojía mis bártulos el hacía lo propio con las cosas del bar... bajó las luces, subió los taburetes....
   -Me ayudas? preguntó él.
Claro.. me acerqué a él para hacer lo que me había pedido  y aspiré el olor de su piel entremezclado con el aroma de un perfume caro con dejes de limón.
   Bajamos la reja hasta la mitad y al soltarla rocé con mis manos su cuello. Noté como un estremecimiento recorría su cuerpo y como si un resorte se tratara se giró y buscó mi boca.
   No supe como reaccionar pero correspondí el beso con la misma intensidad que el suyo. Sin darnos cuenta ambos estabamos fusionados, aspirando  el uno del otro.Sus manos acariciaron mi pelo, mi cara, mientras besaba mi cuello....perdí el control!!! Así es cuando alguien me lo roza.
Los besos fueron correspondidos, los roces pagados con otros roces y la piel fusionada con la otra piel. Nuestra ropa desapareció en poco tiempo y la barra del bar pasó a ser el lugar donde nos fundimos...Entre gemidos, susurros y espasmos, el sudor y el placer recorrió nuestro cuerpo hasta no poder mas.
   Incrédulos por la situación nos miramos al terminar. Nos sonreimos y ambos nos vestimos. Había sido una locura.
   No he vuelto a ese bar... El miedo a que algo tan especial se esfume me lo ha impedido. En mi recuerdo prefiero dejarlo asi.....